21 octubre 2007

Reencontrarse en múltiples variaciones

Se lo intentaba contar a una amiga y me salió así más o menos:
"Era un buen sitio para reencontrarme con él, después de tanto tiempo. Era un sitio que también era un sitio de mi alrededor hace demasiados años, y al que vuelvo por doble motivo, vuelvo al lugar, como a él, vuelvo a escucharle. Y quizá no haya sido su mejor concierto, quizá ni siquiera haya sido uno de los mejores, pero a mí me ha sonado muy bien, a mí me ha agarrado (si, como en esa canción donde le faltaba Drexler). A lo mejor iba predispuesto a que me agarrase, pero qué mas da. Me ha agarrado esa lámpara en mitad del escenario, me ha agarrado que siga tan huraño con los comentarios entre canciones y los dosifique tanto, me ha agarrado escucharle de nuevo Salitre (y que esta vez me recordase a alguien cercano), saborear de nuevo Polvo en el aire, pero sonando mejor, más potente, realmente dejando el polvo en al aire y saliendo por la puerta, Aunque tú no lo sepas, grande como siempre, y el disco nuevo, casi enterito, y digo CASI, porque esa no se la perdono, aunque haya estado sembrado, aunque haya acabado con Vidas Cruzadas y todo el mundo saltando y bailando, por fin rompiendo la supuesta seriedad de un anfiteatro, no le perdono que se haya ido sin tocar mi favorita, esas cosas son de las que uno no perdona, estaba dispuesto a llamarle como aquel tipo tan grande como él que le llama Don Enrique González, pero le ha faltado esa canción, como un truco malo de trilero, aunque el número completo haya sido brillante, ha escatimado esa canción.
Pero estaba la Aristocracia allí también, y eso ha agrandado la noche, esa guitarra que a veces seducía como nunca y como nadie, y otras se lo quedaba todo, sonando como una guitarra-violín o una guitarra-arpa, suave, leve, aguda y dulce, mimosa, y otras como la ramera de máxima calidad, contundente y rabiosa, y esa batería sensual, tremenda, dando compás o dejando el mundo detenido en un platillo o en dos baquetas redentoras que rozaban el cristal de las noches que se recuerdan. Y el bajo a cada instante, en todo y casi siempre, como un buen amigo que a veces parece que no, pero nunca falta, siempre aparece cuando se le necesita. Y la Vida te lleva por caminos raros, y Nos invaden los rusos y Hay partida y Avería y Redención, y muchas más, y la gente pidiendo más y aplaudiendo y pataleando cada vez que amagaban con marcharse, y algún que otro niño que me ha hecho gracia (porque me han inspirado una de esas frases que sólo dicen los padres, yo a su edad no había ido a ningún concierto, y mucho menos a uno tan bueno)".
Pero no ha tocado esa, y a pesar de todo, ha sido grande, una noche de un otoño en negro, un concierto que ha sido reencuentro, una breve charla de quien espero que me perdone por meterme a hacer algo que ella sabe hacer muuuuucho mejor, y conocer por fin a su hermana (si, no te cortes, que no muerde, va, piénsatelo un rato, pero no seas tímida, y no vale esa frase tan elaborada que ya utilizaste) y una cena tranquila después saboreando todo lo de esas dos horas lentamente, para que dure un poco más.

Podría perdonarle incluso que no haya tocado mi favorita, ya veremos, de momento, hoy lo ha hecho muy bien.

Resonando: Polvo en el aire_Quique González

7 comentarios:

Elena -sin h- dijo...

Voy a tener que llamarte asqueroso otra vez? :P Ains... me alegro que lo disfrutases, que fuera especial y hasta me alegro de que no tocase tu favorita. Así volverás a verlo de nuevo, con más ilusión, y cuando la toque (que lo hará, ya verás como sí) la alegría se multiplicará.

Y yo desde tan lejos pude escuchar Salitre (buenos amigos que tiene una :)

vega dijo...

Fué un gran concierto, muy buen concierto. No tan redondo como el del jueves, pero un grandísimo concierto.
Y yo creo que ha mejorado muchísimo en sus comentarios entre canciones, que ahora mira a los ojos y hace bromas y se ríe de sí mismo y de los pequeños desastres que origina...

Y no creo que haya que perdonar a nadie que escriba un post como este.

Y el jueves bordó "la cajita de música" así que supongo que la tocará frecuentemente... pero yo creo que merece la pena renunciar a la cajita de música por vivir esa versión brutal de "días que se escapan" y ese polvo en el aire que es más bonito cada día!

Iraultza dijo...

Sherezade: si, me parece que me quedo con eso de asqueroso, je. Y me parece buena excusa para seguir escuchándole hasta que la toque. Me alegra saber que pudiste escuchar Salitre como si estuvieses allí, ;-).

Vega: le queda camino de mejora, eso sin duda, aún mucho trecho para que hilvane del todo la maravilla de música que hace y no queden tantos silencios grises. Por eso estoy casi, casi a punto de perdonarle, por "Días que se escapan", por "Polvo en el aire", por "Avenidas...", por "Me agarraste" y por todo lo demás, que estoy contigo, cada vez suenan mejor.

Unknown dijo...

Mira que iba desganada y que soy la persona más perversamente crítica con quique gonzález pero el sábado me ganó, como me gana cada vez q lo veo en directo ahora que lo pienso.
Grande la aristocracia del barrio, grande "Salitre", "Hay partida" y ese final con Vidas Cruzadas...sólo faltó el gran ferreiro.
Un gusto ponerte cara. Besos

Iraultza dijo...

Un auténtico placer encontrarte por aquí.
Es lo que tiene este chico, que le quita la desgana hasta al apuntador, con esos trucos fáciles para días duros.....y si llega a aparecer Ferreiro (si, el de Don Enrique González).... Besos con cara. (Ah, por cierto, me encanta!).

(s_gg) dijo...

Confieso nunca haber escuchado a Quique González, pero hablando como hablais todos de él, no lo demoraré más...

Iraultza dijo...

Nunca es tarde...no te lo pierdas, en serio.