Huele bien en cada rincón de la ciudad, especialmente al amanecer, porque aunque en algunos momentos ha sido duro, ya se fue el invierno, porque aunque esa escalera que no llevaba a ninguna parte sigue apoyada detrás de la puerta, ya casi no la veo, porque los bolsillos se quedaron llenos de sonrisas y me las he quedado como un niño que se relame después de zamparse un caramelo, porque subo el volumen de la música y parece que todo se mueve con fluidez...
Resonando: Brianstorm_Arctic Monkeys
2 comentarios:
Holap!
¿Por qué dices que puede sonar a coña lo de que te guste Julio Medem?
Hoy he ido desde la facultad a casa andando, hay como una hora de paseo, pero lo he disfrutado como una enana, percibiendo cada rayo de sol y cada olor primaveral, el azahar de los naranjos, el jazmín, el olor ahierba cortada...
por cierto, me gustan los arctic monkeys!
Ese paseo que cuentas ha tenido que ser genial.
Siempre he sido muy olfativo (huelo la comida antes de comerla, las calles mientras paseo, el perfume que desprende quien está a mi lado en un bar...), pero últimamente esa querencia se ha acentuado. Ayer, en mitad de un atasco, tanta lluvia durante todos estos días, ha conseguido que la ciudad huela a primavera como hacía tiempo que no olía, y eso hace cosquillas hedonistas en mi cerebro.
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